Coberturas para autónomos 

Durante un tiempo, toda la burocracia y el papeleo relacionado con los profesionales que trabajan como autónomos me parecía insondable, algo tan solo al alcance de iluminados expertos en derecho laboral. Me veía incapaz de asumir esa carga, y además trabajar. Sabía que buena parte de los autónomos contrataban los servicios de una asesoría para que les gestionase el papeleo, pero yo no podía permitírmelo, porque ni siquiera podía permitirme pagar la cuota.

Pero un buen día alguien tuvo la bendita idea de ofrecer una tarifa plana para nuevos autónomos y me tiré en plancha a por ella. Y sobre la burocracia y el papeleo… tocaba aprender. Y no fue tan difícil. Poco a poco, aprendí a presentar todos esos formularios habituales de los trabajadores por cuenta propia hasta casi hacerme un experto. Pero ahora que ya han pasado bastantes años me doy cuenta de que siempre estamos aprendiendo. Es el caso de los métodos para desgravar en los que he cometido algunos errores, y casi siempre para perjudicarme o pagar más de la cuenta en la declaración de la renta.

Por eso he decidido hacerme un adeslas seguros para autónomos. Los primeros años que estuve dado de alta como trabajador por cuenta propia no tenía seguro médico privado al margen de la mutua a la que por ley debes pertenecer cuando te das de alta por primera vez. Era joven e inexperto y apenas pisaba el médico, así que no me pareció un gasto imprescindible. Y es cierto que durante un tiempo no lo fue. Entonces mi mujer me ofreció unirme al seguro médico que tenía en su empresa y me pareció bien. 

El problema es que yo no era titular de ese seguro, por lo tanto, no podía utilizarlo para desgravar. Y me di cuenta de que estaba perdiendo dinero, o pagando más de la cuenta, como se quiera ver. Y fue así como finalmente busqué un adeslas seguros para autónomos. Y es que nunca se deja de aprender en este trabajo, sobre todo cuando lo tuyo no es el derecho laboral, la burocracia y los impuestos.